1 ago 2011

El Símbolo de la Eternidad

   Las celebraciones del Año Nuevo Armenio Navasárt son acompañadas en todo momento por un símbolo representativo. Se trata del símbolo armenio de la eternidad presente en la iconografía armenia desde épocas prehistóricas.
   El símbolo armenio de la eternidad deriva del antiguo símbolo solar de los pueblos indoeuropeos. En la más remota antigüedad el hombre en la simpleza de la vida cotidiana y su contacto directo con la naturaleza que lo dominaba todo, notó que el Sol nacía por la mañana llegaba a su plenitud al mediodía y terminaba muriendo por la noche.

El símbolo de la eternidad junto a la llama eterna del Monumento a las Víctimas del Genocidio Armenio en Dzidzernagapert, Ereván, Armenia.
   Sin embargo inexplicablemente resucitaba la mañana siguiente. Este comportamiento cíclico del Sol llevó al nuestros antepasados más remotos a concebir la idea de la eternidad del sol con su consecuente muerte y resurrección. Con el tiempo el signo solar tuvo una aplicación directa en el arte, aplicado a todo tipo de objetos cotidianos, construcciones arquitectónicas, monumentos memoriales, etc.
    En la Edad Media con el afianzamiento y desarrollo inusitado de la arquitectura tradicional armenia, el símbolo de la eternidad es absorbido por el arte cristiano y representado en todo tipo de construcciones. Entre estas se destacan los jachkár en los cuales el símbolo fue evolucionando hasta convertirse en tallas tan complejas y trabajosas que parecen encajes. Estas representaciones en forma de roseta, junto a la cruz y el árbol de la vida le confieren a los jachkár una unidad en su mensaje simbólico basado en las enseñanzas del cristianismo: la vida eterna a través de la fe.
   Con el tiempo y fundamentalmente en nuestros días al símbolo de la eternidad se le ha “agregado” un nuevo significado: la de representar la perennidad del pueblo armenio, es decir la perpetuación de los armenios a través del tiempo a pesar de todos los avatares de la historia. A tal punto esto se ha arraigado que tras la independencia de la República de Armenia y ante la necesidad de nuevos símbolos nacionales, se pensó mantener el escudo de la época soviética, diseñado por el pintor Mardirós Sarián, cambiándole solamente la hoz y el martillo por el símbolo de la eternidad.

Sergio Kniasian

1 comentario:

  1. Me encantó el Blog! Todos los arículos muy interesantes, sigan así!

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